Sin duda alguna uno de los mayores valores que aprecio en esta profesión es la "Honestidad" con "H" en mayúscula, la honestidad como persona y como ser humano, la honestidad hacia tu personaje, la honestidad hacia tu trabajo, la honestidad hacia tu profesión, la Honestidad.
Que duda cabe que en ocasiones nos encontramos con casos deshonestos, a veces inesperados. Hace unas pocas horas he podido comprobar un hecho así, con la boca tan abierta que no se cabía en si misma.
Una vez leí: "...La credibilidad de una persona tiene relación directa con su honestidad. En todas las personas existe un 'código de honor' del cual parte el respetar los pactos. Cuando se rompe un pacto, a veces, no se vuelve a establecer...".
Todo fin abonado con actos deshonestos tiende a convertir el parto en doloroso y dar muerte al feto de la creatividad convirtiendo el campo sembrado en yermo para años futuros.
Una lástima que todavía quede algún "actor" por el mundo que aún no haya aprendido esta lección... El tiempo será el maestro pues es el mejor amigo de la verdad tan necesaria en esta profesión como el aire para respirar y sentir.
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